Reportan en Chiapas hallazgos de crustáceos en piezas de ámbar de hace 22.8 millones de años

·         Chiapas se convierte en el único lugar en el mundo en contar con una colección paleontológica de este tipo

Investigadores del Museo de Paleontología “Eliseo Palacios” en Chiapas, dieron a conocer el reporte de pequeños crustáceos, encontrados en 12 piezas de ámbar que cuentan con una edad de 22.8 millones de años, correspondientes al periodo del Mioceno, las cuales fueron encontradas en la localidad Campo La Granja, del municipio de Simojovel.

En dicha investigación, encabezada por Francisco Vega Vera, investigador de crustáceos fósiles del Instituto de Geología de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), informó que  debido a que las piezas necesitan estar resguardadas en una colección científica reconocida, se realizó la donación al Museo de Paleontología.

Al respecto, el director del Museo de Paleontología, Marco Antonio Coutiño José, destacó que con ello la colección paleontológica que resguarda el estado de Chiapas, es hoy en día una de las más importantes a nivel nacional y con un incalculable valor científico que sin duda fortalecerá los trabajos de investigación en la materia.

Por su parte, Gerardo Carbot Chanona, investigador y responsable del resguardo de estas joyas fósiles, señaló que las piezas convierten a la colección de del estado, en la única colección pública de ámbar en todo el mundo en resguardar piezas con inclusiones de este tipo, en particular los cangrejos, de los cuales sólo ha sido reportado previamente un ejemplar que se encuentra en una colección privada en Estados Unidos.

Basado en los estudios de estos organismos, los investigadores argumentaron que en toda el área que actualmente se ubica Simojovel, hace 22.8 millones de años era una zona costera en la que convergieron diferentes organismos, como estos crustáceos, que abundaron mucho, como ocurre en las especies que viven en la actualidad.

Un dato importante es que los árboles que originaron al ámbar estaban en contacto directo con las aguas marinas, en un ambiente como los mangles de hoy en día, lo que facilitó que muchos de estos organismos se quedaran atrapados en la resina cuando aún estaba en estado líquido.

En las 12 piezas de ámbar recibidas en donación, incluyen en su interior cuatro cangrejos, dos ostrácodos, 54 copépodos, cuatro anfípodos, un isópodo, dos larvas, cinco insectos y un colémbolo, que en total suman 73 inclusiones biológicas.

Finalmente, el coordinador general de Espacios de exhibición, Luis Ángel Espejel García, comentó que al tener bajo resguardo estas piezas de gran valor científico, se está protegiendo el Patrimonio Paleontológico de Chiapas.